viernes, 15 de agosto de 2025

SOBRE LA MULTIPOLARIDAD ESTRUCTURAL

 Leonid Savin

Geopolitika.ru, 26/07/2025

Si observamos el estado del sistema internacional moderno, podemos concluir sin lugar a dudas que se encuentra en una etapa de transición, con procesos de transformación que afectan a la economía, la política, la geopolítica, las normas jurídicas e incluso las religiones. Dicho esto, también se habló de un período de transición en la década de 1990, cuando se derrumbó el sistema bipolar.

¿Cuáles son las diferencias fundamentales entre la transición actual y la anterior, y hacia dónde se dirige el sistema? Los países occidentales hablan ahora de la necesidad de preservar un «orden basado en normas», que remontan al final de la Segunda Guerra Mundial y al surgimiento del modelo de economía internacional de Bretton Woods.

Esta posición muestra claramente que el periodo de transición anterior no afectaba a este orden occidental, sino que tenía como objetivo cambiar los regímenes de aquellos países que se oponían o criticaban el modelo capitalista en economía y el liberalismo en política. En aquel momento, Occidente hablaba con entusiasmo de la transición del autoritarismo a la democracia y ofrecía, o más bien imponía, su visión de la estructura del Estado y las relaciones internacionales. Al mismo tiempo, Occidente, especialmente Estados Unidos, apoyaba activamente las autocracias en Oriente Medio y otras regiones, siempre que siguieran la política del Consenso de Washington. Esta doble moral persiste hasta hoy, como lo demuestra el apoyo de Occidente a la política de genocidio descarado de Israel contra los palestinos y su crítica paralela a Rusia, que desde 2014 aboga por la protección de los derechos de los civiles en Ucrania, incluido el derecho a hablar su lengua materna, el ruso.

Ahora, Occidente en su conjunto denuncia la amenaza del revisionismo de los países que no comparten su visión de las relaciones internacionales o, más precisamente, critican la práctica del neocolonialismo y la hegemonía cultural, utilizados como herramienta de política exterior por Estados Unidos y sus satélites.

Incluso en Estados Unidos, los funcionarios han comenzado a hablar de una transición hacia la multipolaridad y están configurando su nueva política exterior en consonancia con este paradigma.

El tema de la multipolaridad no es un fenómeno de los últimos años, aunque la operación militar especial de Rusia ha servido sin duda de catalizador de este proceso. Existen diversas teorías sobre la multipolaridad, algunas de las cuales hacen hincapié en criterios específicos, mientras que otras se limitan a afirmaciones abstractas. Es necesario repasarlas brevemente para comprender en detalle estos debates, que arrojarán luz sobre el panorama actual de la crisis del sistema internacional.

La descripción más breve de los polos del sistema político internacional la dio el politólogo estadounidense Richard Rosecrance en 1963: «Los sistemas internacionales multipolares, bipolares y unipolares pueden distinguirse de la siguiente manera: la multipolaridad es un sistema multibloque o multiactor; la bipolaridad es un sistema de dos bloques o actores; la unipolaridad es un sistema de un solo bloque o actor. La unipolaridad requiere además una dirección única del bloque preponderante» (Rosecrance, p. 234, nota 12).

Karl Deutsch y David Singer consideraban la multipolaridad como un medio para fomentar una mayor cooperación entre los principales actores (Deutsch y Singer, 1964). Estos dos autores argumentaban que la transición de un sistema bipolar a uno multipolar debería conducir a una disminución de la frecuencia y la intensidad de los conflictos, y que un sistema multipolar se caracteriza por una estabilidad mucho mayor que uno bipolar.

También existe una teoría de la multipolaridad nuclear, en la que los polos son potencias que poseen armas nucleares. Sin embargo, hay diferentes valoraciones de esta teoría. Kenneth Waltz partía de la base de que los Estados son actores racionales inclinados a minimizar los riesgos. Las potencias nucleares se comportarán con extrema cautela en sus relaciones mutuas, ya que son conscientes de que el precio del conflicto podría ser demasiado alto. En su opinión, los Estados con capacidades nucleares reducidas pueden emplear con éxito una estrategia de disuasión contra potencias nucleares mucho más poderosas. Sin embargo, Stephen Cimbala señaló que «sin duda existe la posibilidad de que, en cualquier régimen multilateral y restringido de proliferación nuclear, algunas armas de alcance medio o intermedio tengan que incluirse como «estratégicas» en función de sus efectos potenciales contra posibles adversarios regionales» (Cimbala, 2019). Frank Whelon Wayman introdujo el concepto de multipolaridad en racimo a mediados de la década de 1980. Señaló que «un sistema es multipolar en términos de poder cuando las capacidades están distribuidas de forma más equitativa que en una situación bipolar, y cuando la hostilidad sigue siendo elevada... Un sistema es multipolar en clústeres cuando los Estados están distribuidos de forma más equitativa en el espacio, con muchas oportunidades para los intermediarios y muchas lealtades transversales que moderan la hostilidad... La bipolaridad y la multipolaridad en términos de poder son categorías mutuamente excluyentes» (Wayman, p. 63).

John Mearsheimer propuso dos modelos de multipolaridad. En su libro La tragedia de las grandes potencias, escribió: «Los sistemas multipolares sin un hegemón potencial, lo que yo denomino «multipolaridad equilibrada», siguen siendo propensos a presentar asimetrías de poder entre sus miembros, aunque estas asimetrías no serán tan pronunciadas como las brechas creadas por la presencia de un hegemón aspirante. Por lo tanto, la multipolaridad equilibrada tiende a generar menos temor que la multipolaridad desequilibrada, pero más temor que la bipolaridad» (p. 45). Un sistema multipolar sin un hegemónico potencial es, por lo tanto, una «multipolaridad equilibrada» y tiene como objetivo preservar las asimetrías de poder entre sus miembros. Por lo tanto, la multipolaridad equilibrada produce menos miedo que la multipolaridad desequilibrada, pero más miedo que la bipolaridad (Mearsheimer, p. 45).

De hecho, todos los teóricos presentados pertenecen a la escuela del realismo o neorrealismo en las relaciones internacionales. (Véase mi libro, Ordo Pluriversalis: El fin de la Pax Americana y el auge de la multipolaridad).

En el contexto de la situación internacional actual y los cambios que se están produciendo, se puede concluir que, en ausencia de una clara hegemonía global de Estados Unidos, la situación podría mejorar significativamente, ya que habría más centros de poder. Si la desaparición de la hegemonía de Washington hace automáticamente más independiente y soberana a la Unión Europea, entonces, junto con Rusia y China, podemos hablar de cuatro polos. Con la India, serían cinco. Es difícil decir cómo se llevará a cabo la integración en África y América Latina, que podrían convertirse en polos de poder en el futuro.

Sin embargo, ¿hasta qué punto es realista? ¿Cuáles son los criterios visibles para una transición hacia la multipolaridad? Por ejemplo, si todos los países africanos trabajan más intensamente en la integración regional, ¿significa esto que se creará un polo? Existe la Unión Africana, pero ¿cuál es su papel en la política mundial? ¿Es equivalente a otras asociaciones supranacionales? ¿Se puede considerar la ASEAN como un polo independiente, basándose en la demografía de los países y la participación de los Estados de esta asociación en la economía mundial?

En general, detrás de la creación de un polo geopolítico mundial, ya sea uno o varios, hay una gran potencia que asume la responsabilidad de formar una determinada estructura, es decir, un sistema único de poder que incluye elementos políticos, ideológicos (cosmovisión), económicos y militares (seguridad) que están interconectados a través de diversos acuerdos y formatos de interacción. En un orden mundial bipolar, estos eran evidentes. Estaba la URSS como gran potencia y el bloque socialista, con el Consejo de Asistencia Mutua Económica en la economía, el Pacto de Varsovia en defensa y seguridad, y una ideología común de marxismo y lucha de clases. En el otro lado estaban los Estados Unidos y los Estados capitalistas. El dólar estadounidense se utilizaba como moneda de reserva mundial, extendiéndose más allá de la zona formal de control político de Washington. La OTAN era el principal bloque militar, aunque Estados Unidos tenía otros acuerdos con Estados asiáticos, africanos y latinoamericanos que formalizaban la presencia militar estadounidense en todo el mundo.

Por consiguiente, un polo real en las relaciones internacionales no es solo una potencia nuclear o una gran potencia. Por ejemplo, Pakistán tiene armas nucleares, pero no es una gran potencia y no puede ser un polo según numerosos criterios e indicadores. Un polo real en la geopolítica mundial es una estructura regional o transregional en la que una gran potencia puede actuar como principal impulsora de los procesos y como think tank.

No es casualidad que la cuestión de la unipolaridad comenzara a plantearse incluso antes del colapso de la Unión Soviética, ya que la caída del Muro de Berlín en 1989 y el cambio de régimen en Europa del Este dejaron claros los procesos de desintegración del Pacto de Varsovia, que era un elemento clave de la seguridad en Eurasia. Por eso Charles Krauthammer tituló su artículo «El momento unipolar», basado en una conferencia que dio en Washington en septiembre de 1990. Krauthammer admitía la aparición de la multipolaridad, pero, teniendo en cuenta la Operación Tormenta del Desierto en Irak, señalaba el poder real de Estados Unidos y advertía contra la agitación interna para mantener su posición como único polo de poder en el mundo en el futuro.

Por cierto, Fidel Castro planteó una cuestión similar cuando expresó públicamente esta idea por primera vez el 7 de diciembre de 1989, señalando que «si continúan ciertas tendencias muy negativas, el mundo pasará de la bipolaridad a la unipolaridad bajo el dominio de Estados Unidos». El Muro de Berlín fue derribado un mes antes de su advertencia. Y Fidel previó un posible escenario posterior, que posteriormente se hizo realidad.

El Pacto de Varsovia cesó su cooperación militar en febrero de 1991 y se disolvió oficialmente el 1 de julio del mismo año. El Consejo de Asistencia Económica Mutua dejó de existir el 28 de junio de 1991.

Y la Unión Soviética dejó de existir en diciembre de 1991. Cabe señalar que, en un principio, no fue el actor principal del segundo polo el que se desintegró, sino sus elementos estructurales en forma de un organismo responsable de la seguridad y otro relacionado con la economía.

Y no se ha creado nada similar para sustituirlos. Por supuesto, Rusia se ha vuelto significativamente más fuerte que inmediatamente después del colapso de la URSS. Por iniciativa de Moscú, se crearon la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva y la Unión Económica Euroasiática, pero su efecto es bastante insignificante en comparación con lo que existía durante la era soviética.

Al mismo tiempo, la hegemonía del dólar sigue intacta y la mayoría de las transacciones bancarias mundiales se realizan en esta moneda, aunque existe la práctica de liquidar las cuentas en monedas nacionales y la cuota del yuan chino está creciendo gradualmente.

El bloque de la OTAN ha crecido significativamente, principalmente debido a la adhesión de antiguos miembros del Pacto de Varsovia. Al mismo tiempo, sus objetivos declarados van mucho más allá del Atlántico Norte; ha llevado a cabo intervenciones militares en África (Libia) y tiene acuerdos con países de Oriente Medio y Asia.

Por lo tanto, aunque se habla de la aparición de la multipolaridad, en realidad, si lo miramos desde la perspectiva de las estructuras y no de las grandes potencias o asociaciones supranacionales como la UE, sigue existiendo un polo poderoso establecido por Estados Unidos. Y a pesar de los actuales desacuerdos entre Estados Unidos y la UE, este modelo sigue vigente. Además, este polo se ha hecho más grande y más influyente debido a la expansión de sus elementos estructurales.

China, a pesar de sus enormes éxitos económicos y políticos, no puede ofrecer nada similar para contrarrestar a Occidente. La Iniciativa del Cinturón y Ruta de la Seda no es una nueva versión del Consejo de Asistencia Económica Mutua, sino más bien la aplicación de parte de la política exterior de China. Es de naturaleza centrada en China. La Organización de Cooperación de Shanghái también fue concebida por Pekín para promover sus propios intereses, y la presencia de la India y Pakistán, dos países en constante conflicto, sugiere que no existe una verdadera unidad de propósito.

Por lo tanto, desde la perspectiva de la multipolaridad estructural, solo se puede hablar de un cierto resurgimiento de la bipolaridad, en la que Rusia es el actor clave, pero este polo funciona en un formato diferente y fue catalizado por la operación militar especial en Ucrania. Los nuevos acuerdos de Moscú con Minsk, Pyongyang y Teherán han permitido a Rusia establecer un nivel especial de relaciones con estos Estados socios. El despliegue de armas nucleares en Bielorrusia, la participación de tropas de la RPDC en la guerra de Ucrania y el suministro de equipo necesario por parte de Irán demuestran un nuevo modelo de seguridad emergente en Eurasia. Al mismo tiempo, la OTSC y la UEEA funcionan en paralelo a este proceso.

Por lo tanto, si hablamos de multipolaridad estructural, esta es prácticamente inexistente. Pero será necesario poner fin a la hegemonía unipolar. Por lo tanto, no debemos sucumbir a la ilusión de las declaraciones de los políticos occidentales sobre la llegada de la multipolaridad, entre los que se encuentra el nuevo vicepresidente de Estados Unidos, JD Vance. Sí, Estados Unidos está atravesando actualmente una serie de problemas, pero sus agentes financieros, en forma del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, siguen trabajando activamente para defender la hegemonía del dólar. La OTAN está aumentando su gasto en defensa, y Suecia y Finlandia han sido recientemente aceptadas como nuevos miembros de la alianza.

Al mismo tiempo, se están desarrollando diversas formas de asociación fuera del Atlántico Norte, por ejemplo con la República de Azerbaiyán, lo que indica los intereses globales de la OTAN. Además, Serbia, víctima de los bombardeos de la OTAN, también tiene una serie de acuerdos con esta organización, lo que indica claramente el fortalecimiento del control geopolítico de la OTAN en Europa.

No obstante, la experiencia de Rusia puede aplicarse en otras regiones, creando así una multipolaridad más tangible. Es de esperar que la cooperación de Moscú en África y América Latina dé un impulso correspondiente a este proceso. Por cierto, no fue casualidad que Hugo Chávez propusiera una alianza de defensa para los países latinoamericanos y que, más tarde, Brasil propusiera esta idea en forma de Consejo de Defensa Latinoamericano. Sin embargo, este proyecto nunca se llevó a cabo, ya que Estados Unidos era muy consciente de la amenaza que supondría para sus intereses la creación de un polo geopolítico independiente en el Atlántico Sur. Esperemos que, tras la resolución de las disputas y contradicciones entre varios países de la región, esta idea se lleve a cabo en un formato necesario para la creación de una estructura polar completa, lo que supondría una valiosa contribución a la multipolaridad real que está tomando forma.

Traducción al español para Geopolitika.ru

por el Dr. Enrique Refoyo

Fuente: https://www.thepostil.com

martes, 22 de julio de 2025

IRÁN NO ES SIRIA, TAMPOCO IRAQ, NO SE EQUIVOQUEN...

 Augusto Zamora R.

Rebelión, 23/06/2025

Para situar el tema en contexto es preciso poner los pies en la tierra, literalmente. No son, nunca han sido Irán e Israel potencias equivalentes. Creerse ese cuento es de fanáticos o de majaderos. Israel tiene 26.000 kilómetros cuadrados y ocho millones de habitantes, territorio que debe compartir con cinco millones de palestinos. Carece de recursos naturales y energéticos y su defensa depende, en un 90%, de EEUU y, en menor medida, de las satrapías europeas. No hay más. Irán tiene 1.780.000 kilómetros cuadrados y 90 millones de habitantes. Dispone de algunas de las mayores reservas energéticas del mundo y de incontables recursos naturales. Fabrica la práctica totalidad de su armamento y es, con diferencia, el país más poderoso de Oriente Medio. En un conflicto taco a taco con Israel, la enorme asimetría aseguraría- una rápida y desastrosa derrota de Israel. Las guerras, desde siempre, las suele ganar quien tiene más recursos y más soldados y, en este tema, se engaña solamente quien quiera engañarse. 

Las agencias noticiosas y una generalidad de comentaristas hablan o se refieren a los ataques de Israel contra Irán como si esos ataques los realizaran en su totalidad las Fuerzas genocidas de Israel, pero nada más lejos de la realidad. Israel, por sí mismo, no tiene capacidad para realizar tal tipo de ataques. No lo decimos nosotros. Lo acaba de resumir la revista estadounidense Military Watch, en estos términos:

“Estados Unidos ya participa activamente en el conflicto iraní-israelí, proporcionando no solo inteligencia, datos de objetivos y armamento a las Fuerzas de Defensa de Israel, sino también desplegando sistemas de defensa aérea THAAD del Ejército estadounidense y destructores AEGIS para apoyar la interceptación de misiles balísticos iraníes. Informes no confirmados indican que cazas estadounidenses también han apoyado la interceptación de drones iraníes, como ya hicieron durante intercambios previos menos intensos entre Irán e Israel en abril y octubre de 2024. Según informes, la Fuerza Aérea Israelí también ha dependido en gran medida del apoyo de reabastecimiento aéreo de varios miembros de la OTAN, incluidos Estados Unidos y Alemania, para que sus cazas alcancen objetivos iraníes.” (https://militarywatchmagazine.com/article/us-deploys-stealth-fighter-fleet-middle-east-iran-air-defence).

Sigamos con fuentes de EEUU. El diario The Washington Post, en un artículo firmado por Gerry Shih, Susana Georgey Evan Hill, de 17 de junio de 2025, dice lo siguiente:

“Sin reabastecimientos de Estados Unidos ni una mayor participación de sus fuerzas, algunas evaluaciones proyectan que Israel podría mantener su defensa antimisiles durante 10 o 12 días más si Irán mantiene un ritmo constante de ataques, según una fuente informada sobre las evaluaciones de inteligencia de Estados Unidos e Israel. Añadió que, incluso a finales de esta semana, los sistemas israelíes podrían solo ser capaces de interceptar una proporción menor de misiles debido a la necesidad de racionar la munición defensiva. «Tendrán que seleccionar lo que quieren interceptar», declaró la fuente, que habló bajo condición de anonimato para tratar un asunto delicado. «El sistema ya está desbordado».” (https://www.washingtonpost.com/world/2025/06/17/israel-iran-missile-conflict/).

La revista Military Watch, por su parte, en un artículo del 18 de junio de 2025, titulado “El arsenal de defensa antimisiles de Israel se agotó tras solo cinco días de ataques iraníes”, comenta:

“Los sistemas de defensa antimisiles israelíes han demostrado tener dificultades para interceptar ataques lanzados incluso con misiles balísticos de clase relativamente básica, como los lanzados por las fuerzas de la Coalición Ansurullah en Yemen. Esto ha puesto en seria duda su capacidad para interceptar misiles iraníes de mediano y alto calibre. La escasez israelí de misiles antibalísticos ya era un problema grave a mediados de 2024, con los continuos ataques con misiles balísticos desde Yemen, dos ataques a gran escala desde Irán en abril y septiembre, y, en menor medida, los ataques del grupo paramilitar libanés Hezbolá, que habían agotado el arsenal. Según informes, los exitosos esfuerzos de Hezbolá para atacar específicamente los activos de defensa antimisiles israelíes empeoraron la situación.  Esta escasez llevó a Estados Unidos a desempeñar un papel más importante en la defensa del territorio israelí contra los ataques con misiles, y como resultado, las Fuerzas Armadas estadounidenses también vieron sus arsenales de misiles antibalísticos bajo una creciente presión debido al despliegue de los sistemas THAAD del Ejército estadounidense y AEGIS de la Armada estadounidense para proteger a Israel.” (https://militarywatchmagazine.com/article/israel-missile-defence-increasingly-depleted-iran).

Como pueden leer, en el conflicto de Israel contra Irán, hay mucho ruido y pocos misiles antimisiles. No sólo en los arsenales de Israel, sino en los propios arsenales de EEUU. De esta guisa, podría el presidente Trump ordenar un ataque aéreo contra objetivos iraníes, pero será cosa de echar a suertes los resultados finales de ese ataque. Recordemos, sin ir más lejos, que el operativo aéreo y naval contra las fuerzas hutíes de Yemen, realizado por EEUU, terminó en chasco, pidiendo cacao Washington, pues los hutíes, aparte de derribarles dos docenas de costosos drones y tres costosísimos cazabombarderos, poco más y le pegan un misilazo a uno de sus flamantes portaaviones, lo que habría generado un bochorno mayúsculo, evidenciando la vulnerabilidad de estas plataformas. 

Ahora hagamos números y comparemos el arsenal de los heroicos y osados hutíes con el arsenal que posee Irán. Si EEUU no pudo doblegar a los hutíes, ¿cómo piensa doblegar a Irán? ¿Qué destino les espera a las bases estadounidenses en Bahréin, Qatar o Emiratos Árabes Unidos? Los portaaviones pueden moverse; las bases militares no. Y están, todas, a tiro de pichón de los misiles iraníes.

Pensemos otra cuestión. Los cazabombarderos necesitan campos de aterrizaje. Las bases de EEUU en la península arábiga necesitan el permiso de los gobiernos para poder ser usadas en acciones bélicas. ¿Darían este permiso los respectivos gobiernos, sabiendo que, con ese permiso, están abriendo las puertas del infierno y que sus países serán los que paguen el pato, la pata y el ganso? Arabia Saudita ha expresado su apoyo a Irán y condenado la agresión israelí. Reacciones similares han tenido otros gobiernos de la región. ¿Irán a la guerra contra Irán? Todo es posible, pero, desde aquí, lo dudamos.

Tan es así que EEUU está concentrando sus aviones en bases europeas, sobre todo las de España (¡ay, España, qué vergüenza das!). Si los árabes no dan permiso, los aviones tendrán que despegas de portaaviones y bases europeas. Largas serían las distancias y rusos y chinos alertarían a Irán del despegue de los cazabombarderos gringos. Hay 5.000 kilómetros de España a Irán. Los cazabombarderos tienen, de media, una autonomía de vuelo de 2.000 kilómetros. Tendrían que ser reabastecidos en el aire, lo que retrasaría más su llegada. En suma, de todo habría, menos sorpresa, cuestión ésta de principal importancia en las cosas militares.

Otra cuestión. El ataque sionista, aunque no lo parezca en primera instancia, es parte de un conflicto mayor, de escala mundial, relacionado hondamente con el cambio sistémico que vive el mundo hoy. Un cambio que es esto: la sustitución de cinco siglos y medio de hegemonía occidental por un mundo multipolar, encabezado por las grandes potencias emergentes (China, Rusia, India) y potencias regionales (Irán, Indonesia, Paquistán, Sudáfrica). Nada ni nadie podrá detener el proceso de cambio sistémico. Israel es la pieza de la OTAN en Oriente Medio, como Japón, Taiwán y Corea del Sur lo son en Asia/Pacífico, y Alemania y Polonia en Europa. Fichas de un tablero global.

Desde esa perspectiva, el ataque a Irán es un ataque a la retaguardia estratégica de Rusia y China. A un país esencial en la construcción del mundo multipolar. Se entenderá mejor esto viendo un mapa de Eurasia. En ese mapa puede verse el cubo de países adversarios del atlantismo. Rusia, dominando el Ártico y el flanco europeo. China, la superpotencia que se proyecta hacia el Pacífico. India, dominando el Índico. E Irán, la pieza insustituible en Oriente Medio, el golfo Pérsico y el Mar de Omán. El mundo multipolar frente a los tardo-imperialismos y sus perros guardianes de pocos dientes.

No hay, en este presente, conflictos aislados. El mundo euroasiático es un sistema de vasos comunicantes, de forma que unas crisis están vinculadas o repercuten o tienen derivaciones en las otras. Un conflicto abierto en Oriente Medio sería un regalo para Rusia en Ucrania y para China en Asia/Pacífico. Daba la debilidad de Israel, EEUU tendría que derivar ingentes recursos para sostener al Estado sionista, recursos que se extraerían de fondos destinados a Ucrania, Europa y el Pacífico. Cuanto más grave y más prolongado en el tiempo sea el conflicto, peor para EEUU y mejor para Rusia y China. Y atrozmente mal para Europa, Japón y Corea del Sur, que, como importadores netos de energía, verían desplomarse sus ya débiles economías. Un alza exponencial del gas y el petróleo dinamitaría su tejido industrial y liquidaría miles de empresas. 

Terminamos esto, escrito a vuelapluma y sin más ayuda que el corrector automático, citando a Jude Russo, editor jefe de The American Conservative, en su artículo “No es nuestra guerra”, de 13 de junio pasado:

“El hecho de que Irán se encuentre en la periferia estadounidense (y, en relación con Estados Unidos, sea débil) significa que las consecuencias negativas de incluso una participación directa llegarán con retraso y, al principio, de forma remota, como ocurrió con las consecuencias negativas de la guerra de Irak. Pero quizás no con tanto retraso ni tan remotamente: el poderío estadounidense está mucho más debilitado que en 2003, la sociedad estadounidense está mucho menos cohesionada y el Tesoro estadounidense se encuentra en una situación mucho más precaria. 

Si bien esta situación no es ideal, Estados Unidos puede tomar medidas para mitigar el daño. Parte de la habilidad política consiste en tener en cuenta las insensateces de futuros líderes y anticiparse a ellas. A veces, salir de una región solo se logra saliendo.” (this-is-not-our-war/).

Sabio consejo. Lo dicho. Esto está escrito a vuelapluma que, por su extensión, parece pluma de dinosaurio en transición de T-Rex a ave. Sean benignos con los errores, que es hora de remitirse al sueño (y a un vaso de buen vino).

miércoles, 25 de junio de 2025

LOS INTOXICADORES REUTILIZAN LOS MISMOS BULOS QUE EN LA GUERRA CONTRA IRAK

 mpr21, 22/06/2025

Primero fabricaron un vínculo de Al Qaeda con los atentados del 11 de septiembre de 2001. Luego vincularon a Al Qaeda con Sadam Husein para justificar la invasión de Irak. Más tarde dijeron que tenía armas de destrucción masiva…

El repertorio ha vuelto a reaparecer 20 años después en Irán, que también tiene conexiones con múltiples organizaciones de Oriente Medio, además de armas de destrucción masiva, lo que la OIEA se preocupó por sugerir al mismo tiempo que Israel bombardeaba.

El portavoz oficioso de la CIA en el Washington Post, David Ignatius, ha recibido la orden de hacer circular el siguiente bulo por el mundo: “Un aspecto que ha recibido poca atención es su relación [la de Irán] con las filiales de Al Qaeda. Según exfuncionarios estadounidenses de contraterrorismo, Teherán ha establecido buenas relaciones con el nuevo ‘emir’ de facto de Al Qaeda, Saif Al Adel, quien asumió el poder en 2023 tras la muerte de Ayman Al Zawahiri. Estos exfuncionarios afirman que Adel ayudó a gestionar la planificación de armas de destrucción masiva para Osama Bin Laden”.

“La filial de Al Qaeda en Yemen podría representar un peligro particular. Está dirigida por Saad Bin Atef Al Awlaki, quien publicó un escalofriante vídeo este mes amenazando a funcionarios estadounidenses. ‘Persigan a la escoria del mundo y a sus mayores criminales’, instó a sus partidarios, nombrando a Trump, al vicepresidente J.D. Vance, al secretario de Defensa Pete Hegseth y al exdirector de DOGE Elon Musk. ‘Ya no hay límites después de todo lo que le sucedió a nuestro pueblo en Gaza’, declaró. Según el Jerusalem Post, Awlaki instó a los musulmanes de Europa y América a garantizar que no haya ‘ni un solo lugar seguro’ para los judíos” (*).

Saif Al Adel, el nunca declarado cabecilla “de facto” de Al Qaeda, habría pasado tiempo en Afganistán, Pakistán, Siria, Egipto e Irán desde 2001, donde estuvo bajo arresto domiciliario y posteriormente fue intercambiado por rehenes iraníes retenidos por Al Qaeda en Yemen.

Durante más de dos décadas, Irán ha combatido a Al Qaeda en todos los terrenos. Sus operaciones contra los yihadistas en Irak y Siria fueron, en gran medida, guerras contra las hordas de Al Qaeda. En Yemen, se asocio a los huthíes, quienes combaten a los grupos alineados con Al Qaeda, respaldados por Estados Unidos, en el sur del país. Una situación similar se da en Líbano, donde las fuerzas de Hezbollah llevan años combatiendo a los yihadistas alineados con Al Qaeda, con el apoyo de Irán.

Afirmar que Irán está ahora confabulado con Saif Al Adel, que a su vez es el nuevo cabecilla, según Ignatius, de una Al Qaeda prácticamente extinta, es un bulo descarado. Al igual que el intento de vincular a Irán con armas de destrucción masiva, es un guión preparado de antemano para intensificar aún más la agresión contra Irán para acabar con el gobierno actual.

(*) https://www.washingtonpost.com/opinions/2025/06/13/israel-iran-attack-nuclear-sites/

viernes, 20 de junio de 2025

ATAQUES IRANÍES A OBJETIVOS MILITARES EN ISRAEL Y LA BATALLA CONTRA LA DESINFORMACIÓN

 Xavier Villar

Hispan TV, 20/06/2025 

En las últimas 48 horas, la mayor oleada de ataques con misiles y drones por parte de Irán contra los territorios ocupados comenzó esta misma mañana, marcando un nuevo capítulo en una escalada regional que no muestra signos claros de desescalada.

Frente a esta realidad, las autoridades israelíes, con el respaldo de sus principales plataformas mediáticas, han desplegado una ofensiva informativa destinada a responsabilizar a Teherán de un ataque deliberado contra el hospital Soroka, en la ciudad de Be’er Sheva.

No obstante, la veracidad de estas acusaciones ha sido puesta en entredicho por múltiples fuentes independientes y análisis basados en evidencia geoespacial. Informaciones recogidas en medios hebreos indican que uno de los misiles iraníes impactó en las inmediaciones del hospital, pero expertos militares y mapas satelitales demuestran que el verdadero blanco del ataque fue el cuartel general de mando y comunicaciones del ejército israelí (IDF C4I), ubicado en el parque tecnológico Gav-Yam Negev, contiguo al hospital Soroka. Las imágenes evidencian la proximidad física entre el complejo militar y el centro sanitario, lo que inevitablemente genera preguntas sobre la decisión de Israel de emplazar instalaciones militares sensibles junto a infraestructuras civiles.

Teherán, aunque no ha emitido declaraciones específicas sobre el incidente en Be’er Sheva, ha reiterado en comunicados previos que sus ataques se limitan a objetivos estrictamente militares y responden a agresiones anteriores, como el bombardeo al consulado iraní en Damasco. Esta narrativa sugiere que Irán actúa dentro de un marco de autodefensa legítima, en respuesta a las constantes provocaciones y ataques israelíes.

Infraestructura militar en entornos civiles: la estrategia israelí

Cabe destacar que los centros atacados albergan miles de efectivos militares israelíes, además de sistemas de mando digital, operaciones cibernéticas y las estructuras C4ISR (comando, control, comunicaciones, computación, inteligencia, vigilancia y reconocimiento) del ejército sionista. El diario británico The Guardian también confirmó que el hospital Soroka se utiliza para atender a militares israelíes, mientras que el Ministerio de Salud israelí admitió que el hospital continúa funcionando, sufriendo solo daños menores.

Por otro lado, la organización Maguén David Adom, encargada de emergencias médicas en Israel, reconoció que el verdadero objetivo de los misiles iraníes fue el centro de investigaciones biológicas contiguo al hospital. Este centro, considerado una zona de seguridad sensible, fue estratégicamente ubicado junto al hospital para utilizarlo como escudo humano y cobertura. La pregunta fundamental que se desprende es: ¿por qué Israel decide situar instalaciones militares y de espionaje tan cerca de infraestructuras civiles vitales? Esta práctica pone en grave riesgo a la población civil y constituye una instrumentalización de espacios sanitarios con fines militares.

Distinciones legales y políticas entre ataques

Equiparar el ataque iraní —que impactó en la periferia del hospital Soroka, pero no en su interior ni con el objetivo de destruirlo— con los ataques israelíes repetidos e intencionados contra hospitales palestinos es, además de jurídicamente incorrecto, políticamente engañoso. La operación iraní no fue una “represalia” por los bombardeos a hospitales en Gaza, sino un acto legítimo de autodefensa amparado en el artículo 51 de la Carta de Naciones Unidas, dirigido contra un objetivo militar de alto valor: el centro de mando e inteligencia de las Fuerzas Armadas israelíes.

El Derecho Internacional Humanitario establece, bajo los principios de necesidad militar y proporcionalidad, que los ataques deben limitarse a objetivos militares legítimos y evitar daños excesivos a la población civil en relación con la ventaja militar anticipada. En este caso, Irán apuntó a un blanco militar cercano al hospital, utilizando drones en lugar de misiles de gran potencia para minimizar los daños colaterales y proteger vidas civiles.

Las evidencias visuales indican que no hubo daños estructurales significativos en el hospital, solo efectos secundarios derivados de las ondas expansivas, como ventanas rotas, lo que confirma que se respetaron los principios de proporcionalidad y precaución.

En contraste, la conducta israelí en Gaza ha implicado ataques sistemáticos y reiterados contra hospitales, incluyendo bombardeos directos, el incendio de pacientes y la muerte de bebés en incubadoras, hechos ampliamente documentados. Este uso intencionado de infraestructuras médicas como blancos constituye una práctica que muchos expertos califican como un componente del genocidio contra la población palestina.

Militarización de infraestructuras civiles y acusaciones infundadas

La ubicación deliberada de bases militares junto a hospitales es una estrategia israelí para militarizar infraestructuras civiles, permitiéndoles acusar infundadamente a las víctimas palestinas de “escudos humanos”. Paradójicamente, esta política hace que cada acusación israelí contra la población civil palestina se convierta en una confesión indirecta de su propia instrumentalización militar.

Un escenario regional que se complica para Israel

A nivel geopolítico, la escalada actual no está resultando favorable para Israel. Hace menos de una semana, el régimen israelí lanzó un ataque devastador contra Irán, logrando infligir daños considerables y mostrando una aparente confianza en la debilitada posición del Eje de Resistencia.

Sin embargo, desde entonces, la realidad sobre el terreno ha cambiado: Israel ha perdido su principal refinería de petróleo, una infraestructura crítica para su economía y capacidad bélica. Los daños económicos suman miles de millones de shekels, mientras que Irán ha mantenido sus ataques diarios con misiles y drones, incluso después de reducir su volumen inicial. Las imágenes de destrucción han comenzado a sobrepasar las fronteras de los enemigos tradicionales de Irán, evidenciando un cambio en el alcance y en la dinámica del conflicto.

Impacto en la sociedad iraní y reacciones internacionales

Estos ataques israelíes han provocado un efecto contrario al esperado dentro de Irán. Lejos de provocar divisiones, han conseguido unir a amplios sectores de la sociedad iraní bajo la bandera de la defensa nacional. Este fenómeno es especialmente relevante en un momento en el que, hace apenas unas semanas, pocos imaginaban que la movilización social alcanzaría tal nivel de consenso y determinación.

Por otra parte, la escalada ha obligado a Estados Unidos a reactivar su presencia en la región, a pesar de ser consciente de que está entrando en un terreno peligroso y hostil. La presión sobre Washington es creciente, ya que cualquier implicación directa en el conflicto puede suponer consecuencias desastrosas para sus intereses en Oriente Medio.

Finalmente, la ofensiva israelí también ha provocado un incremento significativo en el apoyo internacional a Irán. A pesar del control que ejercen los grandes medios de comunicación, ciudadanos y movimientos sociales de todo el mundo manifiestan solidaridad con la República Islámica. Incluso grupos que semanas atrás mostraban posturas sectarias o enfrentadas, se han unido en apoyo a la causa iraní, marcando un giro significativo en la percepción global del conflicto y desmontando décadas de guerra mediática contra Teherán.

En definitiva, la reciente escalada entre Irán e Israel revela no solo la complejidad y brutalidad del conflicto regional, sino también la necesidad de analizar los hechos con rigor y perspectiva crítica, alejándose de narrativas simplistas y sesgadas. Mientras Irán actúa dentro de un marco legítimo de autodefensa, Israel continúa desplegando tácticas que ponen en riesgo a la población civil y desafían los principios fundamentales del Derecho Internacional. La verdadera comprensión de este conflicto requiere reconocer las responsabilidades y contextos de cada actor, y evitar confundir actos militares legítimos con campañas sistemáticas de agresión contra infraestructuras civiles que caracterizan un patrón de violencia genocida.

martes, 17 de junio de 2025

SIONISTA, TOMA TU TOMATE

 Por Alejandro Kirk, corresponsal senior de HispanTV 

Hispan TV, 16/06/2025

Seré breve y directo: los fulminantes ataques de Irán contra Israel, las instalaciones destruidas, los chillidos histéricos de los colonos de Tel Aviv, generan un placer vengativo, y reivindican a millones de personas.

Por ejemplo, para quienes hemos estado sometidos por semanas y meses a la vigilancia constante de drones israelíes -zumbando invisibles día y noche en el cielo-  absolutamente indefensos, sabiendo que en cualquier momento puede caer -y cae- un misil en tu cabeza, destruir un edificio, o un barrio entero, en cualquier parte y sin motivo alguno.

Por ejemplo, para quienes hemos presenciado de cerca la destrucción total de viviendas civiles, los pedazos de seres humanos esparcidos entre los escombros dejados por un misil sionista, junto a sus pertenencias: los juguetes bañados en sangre, cuadernos, computadores, zapatos, muebles, vestidos, cosméticos, mantas, cobijas, los vestigios de vidas castigadas solo por existir.

Y el mejor ejemplo, lo que puedan sentir los martirizados habitantes de Gaza y Cisjordania, en pleno desarrollo del genocidio, víctimas del plan de “solución final” del “problema palestino”, por parte del fascismo sionista.

Es difícil describir el placer que genera ver temblando incontrolablemente la mano del sádico y cobarde vocero militar israelí, Avichai Adraee, momentos después de la primera represalia iraní contra la agresión israelí del 13 de junio. El mismo que el día anterior había proclamado representar una “nación invencible”.

¿Por qué produce placer? Porque Adraee era quien mantenía a la población del Líbano en ascuas, día tras día, anunciando ataques en zonas residenciales. Ataques que a veces no se producían, y él se burlaba de las familias que huían con lo puesto sin rumbo. Y se burlaba también de los refugiados, y de las personas que habían sido asesinadas.

Quiso mantener esa arrogancia, pero su mano derecha lo traicionó, temblando como una hoja mientras intentaba una vez más presentar al ente sionista como víctima de los despiadados musulmanes.

Las propia llamada “Fuerza de Defensa” colonial sionista comenzó a quejarse de lo insensibles que son los comandantes iraníes, que atacan  instalaciones civiles o residenciales. Los mismos que desde octubre de 2023 han estado asesinando sistemáticamente, planificadamente, a por lo menos 60 mil civiles palestinos, un  tercio de ellos niños, en Gaza.

Y ¿por qué producen placer los chillidos histéricos en Tel Aviv? Porque, según encuestas, cerca de 95 por ciento de la población colonial respalda el genocidio y la limpieza étnica, y porque de ellos, cerca de 60 por ciento encuentra que Israel ha sido “débil” al perpetrar sus crímenes.

Porque son israelíes comunes y corrientes los que distribuyen videos y memes burlándose de los niños asesinados. Porque son ellos quienes va a una colina cercana a Gaza a ver y aplaudir la masacre en vivo y en directo, y celebran los saqueos y humillaciones que sus soldados cometen contra un pueblo desarmado.

El autodenominado “pueblo elegido” está tomando de su propia medicina, ni más ni menos, y el delirante líder Benjamin Netanyahu (el polaco Mileikowsky) suplica desesperado que Estados Unidos y la OTAN entren en guerra directa con Irán, porque la indirecta no basta. Porque no alcanza con toda la asistencia militar, financiera y política que le prestan, sin la cual su potencia se vuelve cero. Porque no le alcanzan la inteligencia de los satélites y los aviones espías y los misiles de los barcos de sus patronos, para derrotar a la República Islámica de Irán.

El 13 de junio, a través de saboteadores, Israel logró desarticular la defensa antiaérea iraní en la zona occidental del país, y propinar golpes contundentes, asesinar a líderes militares y científicos, y tras ese golpe se proclamó inmediatamente vencedor absoluto.

Subestimando con frases burlonas y racistas al adversario que se perfila como su enterrador.

Dos días después comenzó el infierno que prometió Irán, y que no eran bravatas huecas. Dice el lugar común que las guerras se sabe cómo comienzan, pero no como terminan, y ésta se le fue de las manos al agresor sionista.

El mundo será sin duda un espacio mejor sin Israel y sin el sionismo racista y criminal.

lunes, 16 de junio de 2025

IRÁN CONTRAATACA: PEPE ESCOBAR ANALIZA LA ESCALADA TRAS EL ATAQUE ISRAELÍ, ENTREVISTA CON NIMA ALKHORSHID

 La Casa de mi Tía, 16/06/2025

El sábado 14 de junio de 2025, el reconocido analista geopolítico Pepe Escobar habló en una videoentrevista sobre los recientes acontecimientos en Oriente Medio, en particular la respuesta iraní a un ataque israelí. Escobar describe la situación como histórica y "crucial", ya que forma parte de un conflicto mayor que él llama la "guerra contra los países BRICS". La siguiente transcripción de la entrevista se ha convertido íntegramente en un artículo, destacando las citas clave y reproduciendo fielmente el contenido en alemán.

Escobar, que se encuentra en Moscú, describe la calma que reina allí durante unas vacaciones de cuatro días, pero subraya que las autoridades de seguridad rusas están en alerta constante para evaluar la situación.

Los acontecimientos recientes giran en torno a un ataque israelí contra Irán, que, según Escobar, forma parte de una estrategia más amplia. «Esta es una guerra contra los BRICS, y ahora es una guerra candente», explica, señalando la importancia geopolítica de los estados BRICS (Brasil, Rusia, India, China, Sudáfrica) y su objetivo de integración euroasiática. Considera el ataque a Irán un intento de sabotear esta integración, ya que Irán y Rusia son actores centrales en este proceso.

El papel de Rusia y la asociación estratégica con Irán

Pepe Escobar destaca la alianza estratégica entre Rusia e Irán:

Rusia apoyará a Irán porque tienen un acuerdo estratégico; no una alianza militar completa, sino un acuerdo estratégico. Una de las cláusulas establece: Si una de las partes es atacada por una tercera potencia, recibirá el apoyo de la otra parte de este acuerdo.

Escobar especula que Rusia podría apoyar a Irán con sistemas de defensa aérea S-400 adicionales, ya que se necesitan con urgencia. Sin embargo, Irán ya cuenta con misiles hipersónicos efectivos propios, almacenados de forma segura en instalaciones subterráneas.

La respuesta de Rusia al conflicto actual ha sido hasta ahora "demasiado diplomática, demasiado cortés", afirma Pepe Escobar. Al mismo tiempo, señala rumores de que el presidente Vladimir Putin ha lanzado una clara advertencia al primer ministro israelí Netanyahu:

“Será mejor que pienses dos veces a dónde vas”.

Según Escobar , la próxima semana, especialmente el Foro Económico Internacional en San Petersburgo , mostrará hasta qué punto está realmente dispuesta Rusia a apoyar a Irán.

"¿Hasta dónde llegará Rusia para ayudar a Irán? Esa es la gran pregunta", dijo Escobar.

La condena de China y el contexto global

China también ha respondido a los ataques. Pepe Escobar cita al embajador chino ante la ONU, quien condenó enérgicamente el ataque israelí:

Condenamos enérgicamente el ataque israelí contra Irán. Esto constituye una violación de la soberanía e integridad territorial de Irán. Nos preocupan especialmente los ataques a las instalaciones nucleares; esta es otra línea roja que Israel ha cruzado.

Para China, que considera a Irán un socio estratégico y un importante proveedor de energía, esto es un asunto de seguridad nacional . Según Escobar, las fuertes palabras del embajador chino demuestran que...

“El impacto será inmenso”.

Escobar ve la escalada del conflicto en el contexto de una estrategia geopolítica más amplia: el objetivo es dividir a los estados BRICS y evitar la integración euroasiática.

“El verdadero objetivo es desmantelar los BRICS y detener la integración euroasiática, y ese es precisamente el mayor acontecimiento geopolítico del siglo XXI”, subraya.

Los ataques a Irán y Rusia no son una coincidencia: ambos países desempeñan un papel central en la construcción de un orden mundial multipolar.

El ataque israelí: guerra cibernética y ataques con decapitaciones

Pepe Escobar describe el ataque israelí como una combinación de ciberataques y “ataques de decapitación ” selectivos .

“La primera ola de ataques de Israel fue extremadamente afortunada: lograron piratear las comunicaciones militares de Irán”, explica.

Esto provocó que los sistemas de defensa aérea iraníes quedaran desactivados durante varias horas, lo que permitió a Israel obtener temporalmente el control del espacio aéreo iraní .

“Fue terrible verlo”, dice Escobar.

Los ataques tuvieron como objetivo instalaciones militares y nucleares, así como víctimas civiles, incluyendo científicos y comandantes. Sin embargo, Escobar enfatiza que las instalaciones nucleares iraníes, ubicadas a gran profundidad, no pudieron ser destruidas: "Destruyen la superficie o algunos radares en la superficie, eso es todo". En ocho horas, los técnicos iraníes lograron restablecer el sistema de comunicaciones, lo que él llama un "tiempo récord".

Objetivo: cambio de régimen en Irán

Según Pepe Escobar, el núcleo del ataque fue un claro intento de cambio de régimen :

“Se trata únicamente de un cambio de régimen, nada más”.

Señala la estrategia de larga data de los neoconservadores en Estados Unidos , que han trabajado sistemáticamente para desestabilizar a Irán desde la década de 1990. Ya en 2009, el grupo de expertos Brookings Institution publicó un informe titulado "¿Cuál es el camino hacia Persia?", que describía diversos escenarios para un cambio de régimen en Irán.

“Comencé a analizar estos planes en 2009, cuando todavía estaba en Asia Times ”, explica Escobar.

Los ataques buscan incitar a la población iraní contra el gobierno, pero Escobar enfatiza que tienen el efecto contrario: «Hay unidad en prácticamente todos los estratos de la sociedad iraní tras un ataque directo a Irán y la existencia de víctimas civiles iraníes». Los ataques han unido a la sociedad iraní y han aumentado el odio hacia Occidente e Israel.

El papel de Estados Unidos y Donald Trump

Pepe Escobar: Trump, Israel e Irán: La cuenta regresiva geopolítica hacia la catástrofe nuclear

Un punto central en el análisis de Pepe Escobar es la responsabilidad de Estados Unidos, especialmente del presidente Donald Trump.

«El actual presidente de Estados Unidos ahora tiene dos guerras en su poder», afirma Escobar, refiriéndose a la guerra en Ucrania y al creciente conflicto con Irán.

Escobar acusa a Trump de tender deliberadamente una trampa estratégica a Irán. Mientras Washington aparentemente negociaba un nuevo acuerdo nuclear (el Plan de Acción Integral Conjunto (PAIC) 2.0), Trump dio luz verde a Israel para el ataque:

«Hace apenas unos días, Trump autorizó la entrega de 300 misiles Hellfire a Israel».

Según Escobar, una publicación reciente en Truth Social es una confesión indirecta de su complicidad:

"Esta es una admisión de que él lo sabía desde el principio".

Escobar llama a Trump un “idiota torpe” que es estratégicamente incompetente y está completamente bajo la influencia de los neoconservadores y el lobby sionista.

La reacción de Irán y el umbral nuclear

Según Escobar, Irán respondió rápida y eficazmente lanzando la Operación Castigo Severo, la primera fase de su represalia:

“Lograron reestructurar el liderazgo militar muy, muy rápidamente”.

Los sistemas de defensa aérea se han reactivado y los misiles hipersónicos iraníes han penetrado con éxito la "Cúpula de Hierro" de Israel.

Esta escalada ha provocado un aumento de las demandas en Irán de su propia bomba nuclear:

"Los miembros del parlamento iraní dicen: Necesitamos una bomba nuclear. Sí, la necesitan. La necesitaban ayer".

Según el profesor Seyed Mohammad Marandi, Irán podría ser capaz de desarrollar armas nucleares en una o dos semanas, lo que agravaría drásticamente la situación.

El analista Nema advierte:

«Si Israel implementa su plan de atacar a Irán con armas nucleares, será el fin de Israel».

Escobar está de acuerdo: Esto podría desencadenar una reacción nuclear en cadena.

Irán como símbolo del Sur global

Escobar describe a Irán como un modelo para el Sur global, que resiste al imperialismo liderado por Estados Unidos:

"Irán tenía dos opciones: rendición total o destrucción total. Pero eligió una tercera: la resistencia".

Espera que Rusia y China ayuden entre bastidores a romper la presión occidental. Según Escobar, un posible contraataque estratégico de Irán sería un bloqueo selectivo del Estrecho de Ormuz:

«Este bloqueo selectivo podría destruir por completo la economía occidental».

Un imperio de guerra y mentiras

Para Escobar, el conflicto es parte de una serie interminable de “guerras eternas” impulsadas por el “imperio del caos, la guerra y la mentira”, es decir, Estados Unidos:

“El planeta entero es rehén de un culto a la muerte”.

Irán está ahora en primera línea en la lucha global contra esta secta. Escobar hace un llamado a la solidaridad internacional con Irán.

Conclusión: Una amenaza existencial

Pepe Escobar termina con una dura advertencia:

“Estamos al borde de algo más terrible de lo que nadie pueda imaginar”.

Llama a la humanidad a mantenerse fuerte, a resistir las crecientes guerras y a no abandonar su apoyo a Irán:

"Manténganse fuertes todos, y espero que la humanidad, de alguna manera, salga de esto".

SOBRE LA MULTIPOLARIDAD ESTRUCTURAL

  Leonid Savin Geopolitika.ru , 26/07/2025 Si observamos el estado del sistema internacional moderno, podemos concluir sin lugar a dudas que...